El drenaje linfático (técnica VODDER) es una técnica que tiene como objetivo estimular la circulación de la linfa, un fluido corporal que transporta residuos y toxinas fuera del cuerpo. Aquí están algunas de sus virtudes potenciales:

- Desintoxicación del cuerpo: El sistema linfático ayuda a eliminar los desechos metabólicos, los excesos de líquidos, las toxinas y las bacterias del cuerpo. Al mejorar la circulación de la linfa, el drenaje linfático puede ayudar a desintoxicar el cuerpo y fortalecer el sistema inmunológico.

- Reducción de hinchazón y retención de agua: El drenaje linfático puede ser particularmente beneficioso para las personas que sufren de edema (hinchazón debido a la acumulación de líquido en los tejidos corporales), incluyendo a las mujeres embarazadas y a las personas que están de pie o sentadas durante largos períodos.

- Apoyo para la curación postoperatoria: Después de una cirugía, especialmente la cirugía estética, el drenaje linfático puede ayudar a reducir la hinchazón y acelerar el proceso de curación.

- Relajación y alivio del estrés: El drenaje linfático puede ser relajante y ayudar a reducir el estrés y la ansiedad.

- Mejora de la piel: Al promover la eliminación de desechos y toxinas, el drenaje linfático puede mejorar la apariencia de la piel, haciéndola más brillante y reduciendo la celulitis.

Es importante tener en cuenta que, aunque el drenaje linfático puede ofrecer muchos beneficios, no es adecuado para todos. Algunas personas, como las que sufren de insuficiencia cardíaca o renal aguda, infecciones agudas, o trombosis, deben evitar esta práctica.